Nuevamente me perdí por un par de meses, primero por vacaciones (aunque estuve muy atento en twittear cada cosa que iba viendo en mi viaje y ésto se publicaba automáticamente en el blog) así es que tan ausente no estuve y luego el retomar al trabajo me hacía ver el computador en la semana solo para fines recreativos. Ahora que sé que tengo esas fotos ahí en un archivo y que el tiempo me da un poco de respiro, decido publicar algo de lo que pude observar.
Canadá en pleno invierno puede ser un suplicio si uno no va bien equipado, aunque es cierto que sus ciudades están hechas para que nadie se muera de frío, pero un turista, que quiere ver y caminar sus calles y edificios, sacar fotografías y todo eso, pasa frío. Supe ahí que hay que tener guantes especiales para sacar fotografías, no sirven los mitones, ni los de lana ni nada parecido, pude haber perdido el dedo índice en este viaje.
Lo más reconfortante de todo es que a pesar del frío, la nieve y la inercia de la comodidad del automóvil o el transporte público, la bicicleta estaba estoica ahí en la calle.
Ciclovía en Gatineau con las dificultades de la nieve sin barrer.
Imagen típica en Montreal, Ottawa o Toronto, los universitarios a full sobre las bicis.
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